jueves, 12 de julio de 2012

Olimpíadas de Helsinki 1952


La Guerra Fría, que durante décadas dividió el mundo en dos partes bélicas y ideológicas, convirtió los Juegos Olímpicos de Helsinki un eficiente escenario para las divergencias lideradas por los Estados Unidos y por la Unión Soviética. En abril de 1951, nació Comité Olímpico Soviético. En mayo, el nuevo organismo fue reconocido por el Comité Olímpico Internacional.

En Junio, fue anunciado que las olimpíadas del año siguiente seria en Helsinki, y que estarían compitiendo atletas de la antigua tierra de los czares. La prensa comenzó a especular que pasaría en la capital finlandesa. Todos sabían que iba a ocurrir una especia de Guerra Fría deportiva. El famoso presentador de televisión Ed Sullivan, de los Estados Unidos, declaró que en la Unión Soviética, había apenas dos opciones: o el deporte o la Sibéria.

Las dos potencias pasaron por una lucha titánica para conquistar, cada una el mayor número de medallas. Esto generó preparativos inesperados de ambas partes. En Moscú, el gobierno no apoyó financieramente a los atletas para el entrenamiento. En América, los famosos del cine, Bing Crosby y Bob Hope, lideraron una campaña para obtener US$ 850 mil para la preparación del equipo a la olimpíada.

La intensa rivalidad no impidió la minuciosa organización que los finlandeses le dieron al evento. Aunque conquistaron el mayor número de medallas, ningún atleta de estos países brilló tanto cuanto un deportista que ni siquiera compitió. Las 60 mil personas que asistieron la fiesta de apertura el 19 de julio de 1952, deliraron cuanto Paavo Nurmi entro en el estadio cargando la antorcha olímpica. Él era el más grande atleta de Finlandia y uno de los mayores del mundo.